"En octubre de 2024 se cumplieron 30 años del primer informe de eficiencia y productividad hospitalaria chilena, denominado “Informe Caldera”; a pesar del revuelo que generó en su época, diversos estudios han seguido constatando, que desde 1990 hasta la fecha, los hospitales públicos vienen enfrentando problemas no resueltos de ineficiencia y pérdida de productividad, como el de Rodríguez & Tokman (2000) y el de Lenz-Alcayaga & Páez Pizarro (2023)..."
"En consecuencia si los hospitales públicos chilenos han arrastrado por treinta y tres años problemas estructurales de eficiencia y productividad, es explicable que sean incapaces de cumplir con las expectativas ciudadanas y rendimientos esperados. A pesar de los cuantiosos recursos que el Estado Chileno ha puesto a su disposición a través de la ley anual de presupuesto, incluido lo que se dispondrá para el del próximo año 2025 y aun cuando se hayan incorporado en la gestión presupuestaria el uso de herramientas tan modernas como el mecanismo de pago o sistema GRD. En efecto, solo en la última década 2014-2024 el presupuesto de MINSAL y FONASA han experimentado un crecimiento significativo del 84% real, superando el incremento del Presupuesto del Sector Público (56%) y la evolución del PIB (26,5%) en el mismo periodo."
"En consecuencia, es fundamental transparentar las estructuras de costos de los hospitales para alinear correctamente los costos con los precios de transferencia de Fonasa, si es que queremos que los incrementos del presupuesto del Ministerio de Salud para el año 2025, del orden de los 636 mil millones de pesos adicionales, tengan los niveles de productividad y eficiencia esperados y sean consistentes con la necesidad de disminuir las actuales listas y tiempos de espera. Para lo anterior es clave el acceso a fuentes de datos abiertos, necesarias para la discusión pública y el debate sobre las reformas que urgentemente necesita el sistema hospitalario chileno."
Editores: Héctor Sánchez y Manuel Inostroza
Colaborador: Benjamín Ahumada